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ATENCIÓN TEMPRANA EN EL AUTISMO

  • 01 Abril 2021

Poder diferenciar entre la información adecuada, se convierte a menudo en un reto más para las familias.

La atención temprana es un ámbito de la intervención prioritario para cualquier niño que presente alguna alteración en su desarrollo. Los beneficios para el menor y para su familia son indudables y existe evidencia científica que pone de manifiesto el impacto de la atención temprana en el desarrollo positivo de las habilidades adaptativas, ya que un diagnóstico puede ser realizado a partir de los 18 meses de edad.

Actualmente es posible afirmar que la atención temprana puede favorecer la inclusión escolar y producir mejoras en competencias personales, como en el lenguaje o las habilidades cognitivas socioemocionales.

En nuestra sociedad actual, gracias a Internet, las familias tienen al alcance de su mano una gran cantidad de información sobre una infinidad de temas, entre ellos, una amplia variedad de propuestas de intervención en menores con Autismo. Poder diferenciar entre ellas, las más adecuadas, se convierte a menudo en un reto más para las familias. Teniendo en cuenta que no existe un único programa de intervención dominante o exclusivo en intervención temprana para niños con autismo, cada menor, y su entorno de desarrollo, deben ser evaluados de forma individual, de cara a decidir cuál es el tipo de modelo o enfoque que más lo puede ayudar, o incluso si necesita la combinación de varios enfoques estén refrendados por la evidencia surgida de la experiencia profesional y la investigación, así como refrendados para servir a las necesidades y aspiraciones legítimas de las familias a las que se dirigen.

El especialista que realice el diagnóstico del pequeño deberá entregar a la familia un reporte de recomendaciones terapéuticas, contactos de especialistas para la intervención y un listado de técnicas para la intervención temprana. Antes de hablar de técnicas específicas de intervención, los padres deben reconocer que son parte del tratamiento, ya que son ellos quienes pasan mayor parte del día con sus hijos y son ellos quienes deben seguir las pautas de los profesionales para generalizar los aprendizajes en todos los ámbitos y contextos de la vida.

A continuación, expondré un listado de las áreas a trabajar, los cuales son primordiales y que deben considerarse y lograrse en los niños para un tratamiento terapéutico con resultados positivos:

Objetivos: Aumentar la atención, diversión en las actividades de rutina social, interacción de ida y vuelta, comunicación no verbal (señas con intención comunicativa y lenguaje corporal) e imitación.

Juego: La clave del juego estructurado es la interacción que se debe iniciar mediante los juguetes o ayudas para concretar la socialización de tal modo que la relación interpersonal aumente.

Estrategias de transición: La transición de una actividad a otra, de un espacio a otro con una respuesta adecuada del niño de conformidad.

Comunicación: Una vez que se logran las anteriores aprovechamos su focalización para demostrarle al niño la importancia de la intención comunicativa verbal y que en la vida cotidiana es indispensable. En las próximas columnas hablaremos de programas terapéuticos con resultados eficaces y evidencia científica.

Karla Rocío Arteaga Jeréz.
Miembro de la Asociación “Compartiendo un Mundo A.C.”

Ella dice:
“El especialista que realice el diagnóstico del pequeño deberá entregar a la familia un reporte de recomendaciones terapéuticas, contactos de especialistas para la intervención y un listado de técnicas para la intervención temprana.”